Sábado 4 de Junio 2022
Hacía ya un tiempo que no volvíamos a esta bonita cueva, en suelo guipuzcoano. Para llegar a ella, tenemos que subir pendiente arriba y como no, pedir permiso a las zarzas, que cada vez están más vivas.
Accedemos a ella a través de una pequeña sima de 8 metros y la cueva se divide en dos ramales, dando un desarrollo de unos 1100 metros.
En las inmediaciones de la boca, el grupo con los preparativos.
Comienza la instalación y el descenso.
Una vez abajo uno de los ramales tiene unas grandes dimensiones.
Tiene algún pasico comprometido y prietico.
Y siempre hay alguno que hay que pasarle las zonas de agua, para que no se nos acatarre, pero yo creo que ya se lo merece.
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