25 de Mayo 2024
Con un buen día por delante, esta vez, tocaba volver a tierras alavesas, en concreto en el macizo del Gorbea. Nos reunimos prontito, para tomar un café y charlar sobre la actividad que íbamos a hacer. Nos juntamos un grupo variado, riojanos, navarros, alaveses y zaragozanas.
Josu nos contó la historia de como se descubrió la cueva. En 1977 unas voladuras en la cantera situada, en la cara sur del Gorbea, dejaron al descubierto, la entrada a una de las cuevas más bonitas de Álava. Parando ese mismo año la Diputación de Álava la actividad de la misma. Para posteriormente en 1995 proceder a recuperar el entorno.
Pequeño vídeo de la actividad para introduciros con nosotros en la aventura.
Tras instalar un pozo que nos lleva hasta el río, ya era hora de mojarse un poco. Al final descendemos hasta el cañón de río que nos llevara hasta la cascada final. Durante nuestro descenso y avance nos encontraremos varias galerías que terminan o vuelven al mismo sitio. Eso sí el recorrido está lleno de rincones espectaculares, con estalactitas, coladas y muchas excéntricas.
Llegamos al final del recorrido, y nos encontramos con una espectacular cascada.
Lo que no sabía es que había un pequeño santuario dentro de esta cueva donde la gente pedía a "Santa Estalagmita de Gingia", pillamos a dos devotas.