martes, 12 de mayo de 2015

Torca del balón

9 de mayo de 2015


Video realizado por Sasitroka Canyonig Taldea

De “torca” dice el diccionario de la Real Academia Española que es una “Depresión circular con bordes escarpados en un terreno” y eso es precisamente lo que nos encontramos el sábado 9 de mayo cuando acudimos hasta la pequeña localidad de Abezia, en Álava, Joseba, Oscar de Sasitroka y Xabier. Nos habíamos documentado gracias a la publicación Koloska que el GEA, Grupo Espeleológico Alavés, había realizado sobre la Sierra de Gibijo. De todas formas Joseba se había adelantado anteriormente para asegurar la localización de la cueva.
 Aparcamos los coches en el camino a poco más de 20 metros aunque no habría sido mala idea dejarlos 200 metros antes de subir una cuesta en mal estado.




 Aunque aparentemente parece no ser necesaria cuerda para bajar los primeros metros, por si acaso la utilizaremos dándonos cuenta posteriormente de su necesidad. Utilizamos la de 85 metros atándola a una hermosa haya y no sobrarán muchos metros. Destrepamos unos 15 metros hasta poner otro seguro en el lateral izquierdo. De allí Joseba seguirá descendiendo otros 10 metros para después hacer una travesía horizontal y poner otros tres seguros más, los dos últimos más elevados que los anteriores, a fin de evitar que la cuerda pueda rozar al descender pero especialmente al ascender. Finalmente, demostrando su habilidad Joseba termina la instalación y desciende.

Posteriormente, Xabier y Oskar tendrán que sufrir para superar las dificultades que presentan los diversos fraccionamientos aunque alguna pequeña repisa ayudará. Descenderán hasta el cono de derrubios donde media docena de cráneos de distintos animales les esperan bien ordenados por algún explorador anterior. Desde allí se podrá admirar la gran sala de entrada a la cueva.




En este punto la sala nos ofrece dos posibilidades: seguir descendiendo por dos pozos situados en orientación sur o una galería que conduce al norte. Nos dirigimos por la galería superior de algo más de 300 metros donde una vez superado el caos inicial de rocas se camina cómodamente por un fondo de arenas. Llegaremos a una sala circular con numerosos espeleotemas; estalactitas, macarrones, columnas, banderolas, etc. donde nos deleitamos con la vista y sacaremos unas cuantas fotos. A continuación un paso bajo estrecho que Oskar superará con alguna dificultad y que Joseba y Xabier evitarán con una atlética trepada. Continuamos por la galería hasta encontrarnos una bifurcación con dos galerías paralelas: la de la izquierda terminará en un hermoso balcón sobre la galería derecha. La derecha nos llevará a la sala final. Mientras que Xabier asciende, Joseba desciende por las coladas hasta el sifón final donde ya no podemos continuar. Volveremos rápidamente hasta la sala de entrada siguiendo el camino que nos enseña un murciélago huyendo de nuestras luces al que probablemente habremos despertado de su letargo, no sin antes intentar Joseba el paso estrecho que se le resistirá de nuevo.




Después de reponer fuerzas, Joseba y Oskar se esforzarán por  descender hasta el fondo por el P-43 situado al sur de la sala de entrada. Habrá que montar un pasamanos para evitar un pozo ciego de -24 y alcanzar el pozo por el que queremos destrepar. La instalación compleja, en la cueva todo son parabolts del 12, nos exige hacer recuento de parabolts y mosquetones. Hemos traído muchos pero como mínimo son necesarios 12 para los dos pozos. Joseba se afana en la instalación mientras Oskar se adelanta un poco para explorar cuál será la mejor opción de bajada puesto que el pozo final tiene dos posibilidades. Aparentemente es el primer acceso la mejor opción y es por ese punto por donde Joseba desciende aunque tendrá que volver a subir por la cuerda para volver a poner otro fraccionamiento que evite el roce de la cuerda. La hora de salida se va acercando y en una sabia decisión decidimos no continuar hasta el final puesto que hemos señalado a nuestras familias como hora límite de salida las 8 PM y vamos muy justos. Desmontamos la instalación y reponemos fuerzas antes de comenzar a jumarear el pozo de 42 metros. Oskar abrirá camino con no pocas dificultades tanto para superar el desnivel como para conseguir superar los fraccionamientos pero su satisfacción en el exterior será total


Le sigue Xabier quien cuando alcanza el primer fraccionamiento puede ver a Oskar en la seguridad que ofrece el exterior de la cueva. Aprovechando que los fraccionamientos son cortos y utilizando alguna pequeña repisa consigue anclarse al tercer seguro y pasar el puño hasta la cuerda ascendente sin utilizar los fraccionamientos intermedios. Será más complicado hacer la maniobra de atar el crol a dicha cuerda y finalmente soltar los anclajes pero poniendo todas las fuerzas, podrá seguir progresando. Superamos el siguiente tramo todavía aéreo y en el siguiente fraccionamiento ya tendremos los pies sobre el suelo y subiremos con el jumar hasta el exterior de la cueva donde llegaremos agotados.


Todavía falta Joseba quien a pesar de tener que desmontar toda la instalación llegará rápido al exterior.

Xabier Azanza.


jueves, 7 de mayo de 2015

Peña Gingia

25 de abril 2015

En 1977 las obras de la cantera del Gorbea seccionaron en dos tramos el antiguo conducto subterráneo dejando al descubierto la boca de una de las cuevas más hermosas de Álava. Ese mismo año se paralizó la cantera y en 1995 la Diputación de Álava comenzó la recuperación ecológica.
La boca se abre en medio de una pared al fondo de un parque recreativo.

UN POCO DE INFORMACIÓN:

La cueva presenta un desarrollo de 5.800 m. y 64 de desnivel (+44/-20). Es una galería prácticamente única (pequeños ramales) de orientación NW-SE, por cuya base circula un río subterráneo. Presenta una morfología de Alfiler, con terrazas escalonadas y con una altura media de 30 m., debido a la amplitud de las terrazas superiores, en muchos tramos se puede realizar el recorrido de la cueva bien por el nivel colgado o bien por el río, el cual puede seguirse río arriba durante 2 km., hasta la sala central donde hay varios pozos con bastante profundidad. En el tramo final del río salva bruscamente un desnivel de 25 m. con dos cascadas, enlazadas por un tobogán de 30 grados de inclinación. Por otra parte fuera de la exploración acuática, la cueva presenta una amplia profusión de espeleotemas, lo que da una singular belleza a la cavidad. Cabe destacar la galería Dedal.
Hasta aquí la información de la que disponíamos, acompañada de un pequeño croquis de la cavidad, el cual únicamente valía, por decir que teníamos algo.

LA REALIDAD:

En esta ocasión nos acompañaron los amigos de Sakon y Sasistroka. No teníamos claro cómo vestirnos ya que no sabíamos muy bien qué íbamos a encontrarnos, así que los más militantes nos pusimos el peto de neopreno bajo el buzo y el equipo. El resto se puso “sólo” el peto y el equipo. Cual anuncio de “Michelín”, fuimos a la boca, en la pequeña cuesta y trepada para entrar, los movimientos se hacían un tanto pesados, debido a nuestra “coraza”.Ese día nos ahorramos la sauna, aunque al final te vas acostumbrando.



La entrada de la cueva es espectacular con increíbles rincones, un pequeño destrepe con ayuda de cuerda nos permite continuar con comodidad hasta un paso bajo, por el que llegamos a una sala con unas increíbles formaciones. Yo reconozco que estuve unos minutos tumbado boca arriba y jugando con la luz, disfrutando como hacía mucho. Luego me entró la dudad de si era por la sala o por poder descansar un rato del efecto “Michelín”.
De aquí llegamos a un pequeño cañón, y al salir de este se acabó lo evidente: tocaba mirar, subir, bajar, derecha, izquierda, retroceder, algún pequeño juramento, pero poco a poco vamos avanzando.



Dos instalaciones nos marcan por dónde ir: instalamos, bajamos y seguimos. La progresión no es muy evidente. Tras retroceder por varios pasillos que no llevan a nada, el equipo de hombres globo y el resto de compañeros nos encontramos en una terraza con un pequeño casquillo de spit y sin tener nada claro qué hacer.
Mientras instalábamos el pozo, nuestro amigo Oscar (de Sasistroka) descubre el paso por una rampa un tanto “piernaica”, txapeau!!!. Y por fin nos topamos con el río. Creo que desde que era niño y me llevaban a la playa, nunca había tenido tantas ganas de mojarme, pero el agua solo nos llegaba a los tobillos.


Continuamos por el río hasta que éste se sifona. Por lo menos pudimos mojar el peto un poco, a la vez que lanzar unos alaridos por la temperatura del agua.


Intentamos buscar el paso por una serie de conductos estrechos en los laterales, pero no hubo manera: o se cerraban o tomaban otra dirección. Yo creo que no se nos escapó ninguno y había unos cuantos. Así que, hacia afuera que nos fuimos.



Saliendo vimos una galería a nuestra izquierda con un montoncito de piedras. De aquí varios compañeros se salieron (tenían algo de prisa) y tres continuamos. La galería se va agrandando y empiezan las dudas. Seguimos como siempre: arriba, abajo, vuelta… hasta que llegamos a un pequeño pozo destrepable por la derecha y paso bajo que nos lleva a otra sala, desde la que se oye de nuevo el río. Pero no lo vimos. Miramos por la continuación más evidente, pero nada. Debido a la hora y por estar más rato de lo que se recomienda para una sauna, nos dimos la vuelta.
No parece que estemos lejos de la continuación. Sin duda volveremos para averiguarlo.
Una cavidad realmente excepcional y una muy buena jornada.


Gracias a todos.

domingo, 19 de abril de 2015

Barranco de Artazul 18/04/2015

18 de abril de 2015

Otra vez nos acercamos a este magnífico barranco situado en el diapiro de Ollo. Estuvimos nueve personas disfrutando de un buen día de sol, que nos acompañó hasta el último salto. 





SITUACIÓN: Sierra de Andía. Término de Aizpun. 
MAPA NACIONAL TOPOGRÁFICO: NA-114/IV Ollo

Como bien sabéis sus aguas van a parar al nacedero de Arteta. Hoy prácticamente su caudal era normal tirando a flojo.
Comenzamos con un bonito salto de unos 35 metros en un circo abierto, seguimos por desfiladero continuando por zona abierta y arbolada. Superamos una sucesión de resaltes, llegando al ecuador del cañón, seguimos con una serie de rapeles y toboganes hasta llegar al espectacular salto final de unos 45 metros donde llegamos al circo final del barranco.











martes, 14 de abril de 2015

Día de Las Cuevas

11 de abril de 2015


Este sábado cambiamos la salida que estaba prevista, para colaborar con nuestros compañeros de Otxola, en el "Día de Las Cuevas" que organizaba "Cuevas de Astiz". Se trataba de hacer visitas guiadas a varias cavidades de la zona, no habilitadas, cercanas a la cueva de Mendukilo.
Nos acompañó un esplendido día, y pudimos enseñar a un nutrido grupo de niños y no tan niños varias de estas cuevas.

CUEVAS EGAR1 y EGAR2: Estas dos cuevas son bastante sencillas y bonitas. Aprovechamos para explicar cosas del medio.




CUEVA DE BARREIRA:  Con una entretenida entrada que sirvió para poner un toque de “emoción” al día.


CUEVA DEL CAMINO: Un poco de contacto, pero poco, con rampas y barro.



Realmente fue una muy buena experiencia, tanto para nosotros como, creemos, para nuestros acompañantes. Interesante y didáctica manera de divulgar un poco nuestro deporte. Por nuestra parte para repetir, sin duda. Tuvimos unos acompañantes muy receptivos y participativos tanto los peques como los no tan peques. Esperamos que ellos también se animen a volver.
De aquí, paramos un poco a comer. Después del reposo, con varios de nuestros txikis fuimos a Mendukilo con la idea de llegar hasta el famoso guerrero, donde varios de nosotros no habíamos estado nunca:
Para ello, pasada la pasarela y tras varios pasamanos y una bonita gatera, llegamos hasta el guerrero. Los niños, con alguna pequeña ayuda, tampoco tuvieron ningún problema para llegar.

La sala donde se encuentra el guerrero es espectacular, al igual que el resto de la cueva. Interesante visita. Y, como no, nuestro aplauso para Marco, el benjamín del grupo, que con sus cuatro años estuvo en las cinco cuevas: eso si es cantera, como los demás peques, claro.




viernes, 3 de abril de 2015

Sima de La Mena

28 de marzo de 2015

Este pasado sábado hicimos nuestra primera salida de calendario. Después de unos meses de parón, desempolvamos nuestro material y al agujero que ya había ganas. Esta vez teníamos preparada la bonita sima de "La Mena", situada cerca de Navascués. 


Tiene un desarrollo de unos 250 metros y un desnivel de -80 metros. Situada en “la Hoya Mena, muy cerca de la pista que sube por el barranco de la foz de Benasa.
La cavidad se encuentra en el fondo de una dolina, rodeada de árboles.  Boca de unos 3x1  por la que se accede al primer pozo de 20 metros, intercomunicándose con el segundo pozo de otros 20 metros a través de una ventana.

 

Llegamos al fondo, y tras un pequeño resalte de unos 5 metros, comienza una galería, que toma dirección E, de gran tamaño. Hay marcas de que haya habido corriente de agua, que parece que se pierde en un pozo de unos 15 metros que hace de sumidero.



Tras una pequeña trepada entre bloques, se alcanza una galería fósil de buen tamaño de unos 150 metros, acabando en una colada. Esta galería es de gran belleza, con abundantes espeleotemas, excéntricas, y aragonitos. Entre las formaciones destaca una con forma de medusa.





jueves, 26 de febrero de 2015

Ermittia Kobea

21 de febrero de 2015

Este pasado sábado no paró de llover y como para mojarse daba igual el sitio, nos fuimos junto a los amigos de Sakon a Ermitta Kobea, cerca de Deba. Cueva de unos 17 km. de galerías en ocasiones laberínticas y al menos 3 pisos. Algunos conocíamos la galería superior, ya que habíamos estado hace algún tiempo con los peques, por lo demás, no teníamos ni topografía ni apenas referencias. De boca pequeña, con bastante vegetación y restos de una antigua puerta.


La entrada es estrecha pero cómoda, dando paso a una amplía galería con diversos ramales. Un meandro comunica con el piso inferior al que se accede también por un pasamanos y un pequeño pozo rampa, por el que bajamos nosotros, ya que lo del meandro todavía no lo teníamos claro.  El pozo da a una sala con una galería que toma dos direcciones:
Una paralela a la que venimos, de la que hablaremos más adelante.



 Y otra que da a una  gatera, continua por pequeña y estrecha trepada lateral  y paso bajo (ya en nuestra salsa) para salir a la sala del bidón, llamado así (suponemos) por un bidón colocado bajo un chorro de agua.



De aquí la cavidad empieza a tomar tintes más laberínticos, con bastantes ramales. Y, como no lo tenemos nada claro, vamos por donde mejor nos va pareciendo, mirando laterales.. en definitiva, disfrutando. Ya lo dice el dicho “busca lo bonito no lo evidente”, nos saltamos muchas cosas, y es que todo no se puede….




Ya en una sala circular encontramos un pozo equipado de unos 12 m. por el que bajamos y de nuevo, más galerías. Miramos varias, hasta que dio la hora que habíamos fijado para volver, así que a buscar la salida. No hubo problemas y pronto estábamos debajo del pasamanos. Ahí vimos la galería inferior paralela a la de la entrada, con curiosas formaciones, y encontramos el paso del meandro.




Nuestra idea inicial era ver si teníamos suerte y podíamos llegar a la sala de las maravillas, pero no pudo ser, muchos ramales y pocos datos (por decir algo).




Por el contrario, una cavidad muy entretenida en la que disfrutamos por sus recovecos.
 Y lo que queda…

 Sin duda, volveremos pronto.



Cueva de Basaura

26 de febrero de 2015.

Nuestro compañero Xabier Azanza, nos envía estas dos curiosas fotos. Debido a las intensas precipitaciones de estos días, tal es la carga de agua en el macizo, que el complejo de Basaura se ha inundado completamente saliendo el agua por la boca grande de la cueva, fenómeno no muy habitual.