jueves, 21 de marzo de 2019

TRAVESÍA CABALLOS-VALLE


Travesía Caballos-Valle. 10.700m


La necesidad que encuentra un espeleólogo de meterse bajo tierra solo es comparable a la necesidad de salir de ella siguiendo el instinto de supervivencia. Y esto, ocurre muchas veces en estas megas travesías.

El sistema Red del Silencio cuenta con la travesía Caballos-Valle, uno de los recorridos integrales más largos de la península Ibérica.



Esta vez nos juntamos tres miembros de AKELAR con unos amigos de Madrid para afrontar esta mítica travesía. Había estado luciendo el sol toda la semana, pero el día propuesto para atacar la travesía, la lluvia y el viento hicieron su aparición, con su cara más cruda. Son las 8:00h de la mañana y algunos no quieren ni salir de la furgoneta. Reunión de urgencia en una marquesina que no consigue mantenernos secos por las ráfagas de viento y aguaceros. Aplazamos la decisión hasta las 10:00h, y veremos entonces si el tiempo mejora y si nos atrevemos con Caballos-Valle. A todo correr cada rata a su furgoneta o coche, que ya hemos chupado suficiente frio y agua. Las 10:00h, a todo correr a la marquesina, no hay cambio en el tiempo pero nos abrieron el Bar. Toca meterse algo caliente y hacer tiempo, dado que aplazamos la decisión hasta las 12:00h. Subir desde Madrid y volver a juntarnos bien merece luchar un poco antes de echarse atrás en esta aventura.


A las 12:00h nos ponemos en camino hacia la Torca de Hoyón (Caballos), bajo una fina lluvia. En la boca de la Torca llega el trágico momento de indecisión, entrar o no. Cae agua por totas partes, colándose por la roca caliza y solo tenemos una cosa en la cabeza…¡cuánta encontraremos dentro!. La Torca está equipada y decidiremos si damos marcha atrás según vallamos viendo y bajando por Hoyón.



Fuimos bajando uno a uno todos los pozos entre risas por la chupa que íbamos cogiendo. No eran pozos regados, esta vez caían auténticos ríos por la Torca.

Después de bajar la vertical y poner los pies en el suelo nos dirigimos hacia el rio, y una vez en este… ¡lo esperado!, está bien cargado, pero ya que estamos mojados para dentro. Alguno nadaba hasta con las orejas en las pozas, estábamos mojados de arriba abajo. Al llegar y observar el aporte que recibe el sistema por parte de Jornos, nos sale la risa tonta a alguno. ¿Como estará el sifón?.




Las instalaciones de la parte media de la travesía están en muy  buen estado. Así las cuerdas que nos llevan hasta la Galería de las Marionetas (E13). Después llegamos a la Galería Del Papel, aquí hay que tomar una decisión. Ir hacia el Sifón Temporal o coger el desvió hacia Papel. El desvió se encuentra bien señalizado. Nosotros decidimos ir hacia el Sifón dado que solo lleva lloviendo el día de hoy y creemos no habrá dado tiempo a que se llene de agua el sifón. Cruzamos el pasamano del Balcón y llegamos al Sifón Temporal, ¡bingo!, esta practicable. Esto nos ahorra esfuerzo y tiempo, y nos da un impulso moral, ya que tanta agua nos había dejado tocados moral y físicamente. 




Un E18 nos deja en la Galería Lógica. Otro E15 en la Galería de los Gotxos. A esta accedemos a través de una curiosa ventana, y es que la naturaleza en esto de sorprendernos no tiene fin. De aquí un P20 nos deposita cerca del Libro. Una mochila que cuelga del techo contiene el libro de anotaciones. Estamos en la confluencia con La Canal. Si queremos dar por terminada la travesía optaremos por salir por La Canal o también si en este momento nos escasean las fuerzas para continuar hacia Valle. Nosotros anotamos número de personas que componen el grupo, hora de paso y dirección hacia Valle. A partir de aquí nos esperan algunos laminadores para dar paso a la Galería De La Luna. Unos pequeños cráteres nos dan la bienvenida cual si fuera una galería bombardeada. La Galería cobra en amplitud y es de fondo arenoso, estamos en el Sahara. Paradita para comer e hidratarnos. Las galerías fósiles nos han hecho entrar en calor y secar un poco el mono…pero llegamos a La Playa.




Aquí no cabe otra que volverte a mojar, y no es que haga gracia ahora que habíamos entrado en calor, pero... Superados los tres caos de bloques, ya solo nos queda afrontar el agujero soplador y sentir el aire frio sobre nuestra mojada piel. Aún nos queda por superar la badina final…jode, otra vez de agua hasta las orejas y es que de esta travesía no sales sin mojarte En nuestro caso sin pasar a remojo muchas horas. Por hoy damos por saciada esa necesidad de meternos bajo tierra. Han sido 15 horas para estos 6 amigos. 



lunes, 4 de marzo de 2019

TRAVESIA C50 - VERNA- TUNEL EDF


Travesía C50-Verna túnel EDF. Tiene un desarrollo de 6050m y un desnivel entre bocas de -696m.


Habíamos quedado con diferentes amig@s para adentrarnos en el sistema de La Piedra De San Martin. Entraríamos por la poco conocida sima C50. Agradecer al grupo espeleológico OTXOLA por dejarnos usar su instalación para el descenso de la sima. La C50 tiene una profundidad de -334m y un desarrollo de 930m.

En esta ocasión acompañábamos al grupo de comapañer@s dos miembros de AKELAR.



Dormimos en las furgonetas en la curva  helicoidal que sube a Larra, cerca de la estación de esquí de la Contienda, desde aquí hasta la sima el camino es sencillo, rápido y no tiene perdida.


Una vez en las cuerdas hay que poner mucha atención en los primeros pozos ante la posibilidad de caída de piedras a la vertical. El P40 tiene una chapa que protege de esa posibilidad, ojo en este punto con las piedras. Dentro aun encontramos bloques de hielo formadas de las nieves de invierno que perduran todo el año. La sima continúa con una sucesión de pozos estéticos bien labrados hasta llegar a la guinda de la sima, el P100 Jean René. Después nos encontraremos con un péndulo que a más de uno le pondrá a prueba en sus técnicas de progresión en cuerda.



Una vez en el fondo de la sima nos topamos con el meandro Rushbar, algo estrecho en algunos puntos y sobre todo si llevamos una mochila voluminosa. Por el fondo del meandro se avanza con facilidad, no trepar, seguir siempre por el fondo. Así llegamos a una bifurcación que cogeremos a la izquierda que nos conducirá hasta el Gran Cañon.


Ya en el Gran Cañon nos ponemos los neoprenos, picamos un poco y continuamos. El agua que baja el rio nos llega hasta las rodillas, por lo tanto no tendremos problemas en el sifón. Desde que el meandro Rushbar nos expulsó al Gran Cañón nos encontramos en la zona de travesía clásica de todas las bocas superiores del sistema de La Piedra De San Martin con la Verna.


Una vez en el Túnel Del Viento el agua gélida hace sacar un alarido a más de uno. Este se encuentra cosido de cuerdas fijas que te ayudan en la progresión, y de esta forma sortearlo lo más rápido posible, dado que el agua está bien fría.


Nosotros nos despojamos de los neoprenos en la sala del Aragonito, la travesía discurre hacia la Verna comunicando una tras otra galerías de gran tamaño y grandiosidad, que nos dejan boquiabiertos. Una vez en la sala Lepineux, respiramos la historia de la espeleología, la solemnidad y tragedia vivida en semejante lugar nos encoge de hombros. Nos encontramos en la Zona 0 de de nuestro deporte.



De aquí continuamos la travesía hacia la Verna, acompañándonos en nuestros pensamientos estos primeros espeleólogos como como el pionero Marcel Loubens que encontró su trágico final en tal pintoresco lugar.


Llegamos a Sala Verna y nos recreamos un poco en observar su tamaño y grandeza. Los maniquís vestidos de espeleólogo puestos para las visitas turísticas se pierden en la inmensidad y oscuridad de esta enorme sala. Hoy no coincidimos con ninguna  visita turística, por lo tanto no tenemos la opción de ver la Verna iluminada, y por mucho que queramos nuestras frontales no son capaces de cortar tanta oscuridad.


Para acabar el día solo nos separan los 650m del túnel EDF. La puerta de metal nos da acceso al exterior, y aquí, damos por concluida nuestra pequeña aventura en el sistema de la Piedra De San Martin.   


Y por si a alguien le apetece un poco más,dejamos también un bonito vídeo de la travesía.A disfrutar ¡¡